Día Mundial del Turismo - 27 de septiembre de 2022

Tema: Repensar el turismo

En la mente del viajero, la palabra "turismo" puede evocar nociones de relajación, actividad recreativa, experiencias culturales de inmersión o realización de negocios fuera de casa. Todo depende de los intereses y motivos del viajero. Aunque el turismo puede significar cosas diferentes para distintos visitantes, lo que es común a las experiencias de los visitantes son los momentos de conexión con la cultura local, la comunidad, la tradición y el entorno natural de los destinos de viaje que resonarán durante años. Ahora que la Asociación de Estados del Caribe (AEC) se une a la comunidad internacional para reconocer el Día Mundial del Turismo 2022, merece la pena reflexionar sobre cómo ha evolucionado la industria del turismo durante el pasado año, uno de los periodos más difíciles y sin precedentes que ha afrontado el sector. En respuesta al impacto negativo de la pandemia de COVID-19, los esfuerzos de los países del Gran Caribe para garantizar el entusiasmo por los viajes se mantuvieron altos a través de la priorización de las vacunas, la digitalización de los servicios de viaje y el refuerzo de las estrategias de gestión de crisis para mejorar las medidas de seguridad de los visitantes y reducir la ansiedad de los turistas en relación con los viajes. La realización de estos esfuerzos para seguir siendo relevantes y competitivos en el mercado se hizo cada vez más necesaria a medida que la pandemia sacaba a la luz retos anteriormente ignorados en este vulnerable sector.

A medida que la región va pasando de la imposición de protocolos sanitarios obligatorios a la autorización del uso opcional de mascarillas, a políticas de pruebas más relajadas y una menor dependencia de los protocolos de cuarentena, es evidente que se ha puesto en marcha un proceso de adaptación. Además, hay indicios de que se están suavizando las restricciones a los viajes, ya que se reconoce claramente que el sector de los viajes se ha visto muy afectado y que, por tanto, es imperativo adoptar medidas para impulsar una rápida recuperación. Los impactos del cambio climático siguen manifestándose de forma extrema y, por lo tanto, también suponen un obstáculo adicional que la industria regional debe superar, teniendo en cuenta que la mayoría de nuestros miembros pueden ser calificados como Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID). Ante estas realidades, es más necesario que nunca reimaginar el enfoque de la industria turística para que tenga en cuenta las estrategias de adaptación a las externalidades medioambientales y favorezca el bienestar medioambiental del Gran Caribe.   

A pesar de estos retos, la región del Gran Caribe sigue trazando su curso hacia adelante con optimismo, ya que se vislumbra el fin de los efectos más devastadores de la pandemia. El turismo regional sigue siendo una piedra angular del desarrollo y el crecimiento, y seguimos observando su progreso y rendimiento a pesar de las circunstancias imperantes. De hecho, estudios recientes realizados sobre la industria turística del Gran Caribe han demostrado que el rendimiento de la subregión ha superado ampliamente a sus homólogos internacionales en el primer trimestre de 2022, y que el tiempo de recuperación de la región ante las crisis es más corto. Por lo tanto, la región debe basarse en esto y seguir aprovechando la innovación, las alianzas, la resiliencia y la coopetición durante este tiempo impredecible para impulsar una fuerte recuperación de la industria del turismo y ayudar a los afectados negativamente. Como enfoque proactivo para abordar los retos y las responsabilidades, las partes interesadas deben participar activamente en el desarrollo del turismo sostenible como palanca de adaptación proactiva. También es primordial mantener como parte de nuestro mandato la adecuada coordinación y ejecución de iniciativas que sean armoniosas con el medio ambiente para preservar el ecosistema natural y los recursos de los que dependen el Gran Caribe y su industria turística. En este sentido, la conservación del Mar Caribe es vital. Una multitud de desafíos amenazan la salud y la vitalidad del Mar Caribe y esto hace que su preservación para las generaciones presentes y futuras se traduzca en algo fundamental para el desarrollo sostenible de la industria turística regional.

A la luz de esto, la AEC ha sido capaz de fomentar acciones sostenibles y responsables para la recuperación del turismo y el beneficio general de sus miembros. Reconociendo la necesidad de reactivar el turismo regional, seguimos comprometidos a apoyar la adopción por parte de la región de prácticas líderes en el sector que redunden en un mayor atractivo para los visitantes. Así, nos hemos centrado en el desarrollo de una estrategia regional de turismo, el fortalecimiento de la capacidad de gestión de crisis y de las medidas de seguridad de los visitantes en los destinos turísticos, la revitalización de la Zona de Turismo Sostenible del Gran Caribe (ZTSC) y el apoyo a un proceso de transformación digital en el sector. Estas iniciativas servirán colectivamente como sistema para planificar la evolución de las necesidades turísticas de la región y ampliar el turismo sostenible como vehículo principal de desarrollo económico. A pesar de la adversidad, hay esperanza de prosperar mediante una acción concertada. Estos elementos constituyen la base de nuestros esfuerzos en la región, mientras seguimos observando las tendencias mundiales y dando respuestas oportunas e innovadoras a las mismas. Creemos que repensar el turismo, especialmente en este período crucial, es fomentar plenamente la participación inclusiva de todos nuestros actores que forman el corazón de la industria y garantizar que sus necesidades sean plenamente atendidas.

Sobre todo, para "repensar" con éxito e impulsar la industria del turismo, les animamos a ustedes, nuestras partes interesadas, a participar activamente en el proceso de volver a construir mejor y de forma más sostenible.

Feliz Día Mundial del Turismo. 

Sobre la AEC

La Asociación de Estados del Caribe es la organización para la consulta, la cooperación y la acción concertada en la esfera del comercio, el transporte, el turismo sostenible y los desastres naturales en el Gran Caribe. Sus Estados Miembros son Antigua y Barbuda, Las Bahamas, Barbados, Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, República Dominicana, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, México, Jamaica, Nicaragua, Panamá, St. Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago, y Venezuela. Sus Miembros Asociados son Aruba, Curazao, (Francia, en nombre de Guyana Francesa, San Bartolomé y San Martín), Guadalupe, Los Países Bajos, en nombre de Bonaire, Saba y Sint Eustatius, Martinica, Sint Maarten, Islas Turcas y Caicos.